Repensando un país, Repensando la Universidad…

En las últimas décadas Venezuela ha sufrido cambios dramáticos. Pero el mundo que nos rodea ha sufrido cambios aun más profundos. Es un hecho que ninguna sociedad moderna puede vivir aislada del resto del mundo. Todo lo contrario, es la interrelación la que catapulta la modernidad y el desarrollo. Lamentablemente Venezuela llego a esa carrera del desarrollo de manera tardía. Pero al mismo tiempo tenemos la suerte de contar con un recurso indispensable para que el desarrollo del resto del mundo se pueda dar: EL PETROLEO. Eso nos da la ventaja estratégica incuestionable, de tener una fuente de recursos económicos de grandes magnitudes. Lo suficientemente grandes como para darnos la libertad de soñar cualquier camino de desarrollo y poder llevarlo acabo. Nuestro problema es que nunca hemos sido consecuentes con la ciencia de planificar. Es en este punto donde repensar la UNIVERSIDAD se hace perentorio. Necesitamos universidades capaces de generar esos proyectos, de generar los planes, de generar los productos que nos permitan desarrollar a Venezuela.. La estructura que en este momento presenta la universidad venezolana no permite que eso sea así. Han sido muchos años de politiquería barata la que han sufrido nuestras máximas casas de estudio desde la década del sesenta. Han sido muchos años de mediocridad cabalgante, de incentivos paupérrimos, de sabotaje pueril, de servilismo político y de roscas enquistadas. Pero sobre todo han sido muchos años de ausencia de definiciones. Los cambios reales de nuestro país pasan por generar una estructura estable, comprometida, estimulada, y libre, donde participen las mejores mentes y que sus productos sean valorados por el uso que nuestra sociedad le de. Esa es la UNIVERSIDAD.

PD. Podemos empezar por colocar el sueldo del profesor mas bajo en el escalafón al mismo nivel que el de un congresante y cada vez que ellos se suban los sueldos, lo mismo ocurra con la escala de ingresos de los profesores universitarios. Que no existan profesores con otra figura que la de dedicación exclusiva. Que no exista estabilidad laboral para nadie, sino después de 20 años de servicio ininterrumpido. Que los profesores sean evaluados según sus productos cada cuatro años. Que la relación de número de empleados por profesor sea de 1:4. Que los recursos económicos de las universidades sean un porcentaje fijo del Producto Interno Bruto. Y que se elimine la idea que las Universidades son medios para hacer Justicia Social. Son sugerencias nada mas….